Mayores y conducción, envejecimiento activo de forma segura y saludable

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Mayores y conducción, envejecimiento activo de forma segura y saludable

P(A)T promueve la concienciación y formación de las personas mayores sobre hábitos seguros de desplazamiento en diferentes tipos de transporte

No es ningún secreto que, en algunos casos, al hacernos mayores podemos ir perdiendo audición, visión, movilidad, etc., cuestiones de salud que pueden ser un riesgo a la hora de conducir. Es por ello que la Dirección General de Tráfico ha querido lanzar unos consejos: «Solo por ser #mayores, no debemos renunciar a la movilidad. Pero, ya seamos conductores o peatones, con la edad podemos tardar algún segundo más en decidir o reaccionar. Para asumir #CeroRiesgos: Circula con calma.  Aumenta la distancia de seguridad. Evita distracciones».

Actualmente, en España no hay limitación del permiso de conducir por edad, todo depende de las capacidades y aptitudes que tenga la persona que tiene que conducir. Cierto es que la renovación es cada 10 años y después de los 65 años debemos renovar el carnet a los 5 o a los 3 años según el tipo de permiso.

En el ámbito rural, donde no hay o hay poco transporte público, existe la renovación del permiso de conducir «con restricciones» para aquellas personas que no tienen plenas facultades pero que necesitan de vital importancia el coche en sus desplazamientos para ir al médico, farmacia, etc. En estos casos hay limitaciones donde solo se les deja conducir a 30km del domicilio o no conducir por la noche, por ejemplo. Con una población cada vez más envejecida, en 2023, ya se contabilizaron 70.000 autorizaciones para conducir con estas condiciones.

 

Sin embargo, los derechos a la movilidad y a la seguridad pueden entrar en conflicto en el acto de la conducción si las capacidades psicofisiológicas se ven afectadas negativamente.

Por ello P(A)T promueve la concienciación y formación de las personas mayores sobre hábitos seguros de desplazamiento en diferentes tipos de transporte, centrándose sobre la progresiva limitación de las capacidades y habilidades y todo lo que significa y sobre los beneficios de un envejecimiento activo y saludable. Es necesario concienciar para que los familiares puedan advertir en caso de no tener las capacidades adecuadas para conducir y ver las concretas condiciones que se tienen a medida que se van cumpliendo años y como puede influir en sus desplazamientos en los diferentes modos de transporte. Así será más fácil que todos nos adaptemos para ejercer el derecho a la movilidad y al envejecimiento activo de forma segura y saludable.