LA VULNERABILIDAD DE L@S MOTORISTAS
Las carreras ilegales en motocicleta siguen siendo un problema actual. En la 30ª Jornada Técnica de ADEVIC y la 14ª Jornada Estatal de FETEVI que tuvieron lugar el pasado 1, 2 y 3 de junio en Figueres, P(A)T visibilizó este problema.
En la 30ª Jornada Técnica de ADEVIC y la 14ª Jornada Estatal de FETEVI que tuvieron lugar el pasado 1, 2 y 3 de junio en Figueres, Yolanda Doménech, directora de P(A)T, y Vicente Sánchez, president de P(A)T, visibilizaron el problema aún latente de las carreras ilegales en motocicleta.
Yolanda se centró en los valores imperantes que sostienen las actitudes que tenemos al conducir y que causan las carreras ilegales siendo la máxima expresión de los valores patriarcales: agresividad, competitividad, egoísmo y una libertad mal entendida. Desde los estudios académicos, se habla de que los hombres sienten necesidad de mostrarse independientes, autosuficientes, fuertes, robustos y duros, y es precisamente en esta búsqueda de poder y de invulnerabilidad lo que los lleva a realizar conductas de riesgo como lo son las carreras ilegales y conducción temeraria, poniendo su vida al servicio de la afirmación de su masculinidad. También se percibe esta asunción del riesgo en los datos, pues muestran que los hombres mueren más y provocan más siniestros con consecuencias graves y cometen más imprudencias y más conductas temerarias, y de hecho, en los cursos de recuperación de puntos, la mayoría son hombres. Además, estas conductas se ven reforzadas por el reconocimiento social hacia estos hombres de apreciación y recompensa en forma de comentarios positivos, que es un factor clave de estas conductas de riesgo. Yolanda ve un futuro positivo, pues cree que estos valores no están tan extendidos en los más jóvenes y que es importantísimo abordarlos y redirigirlos hacia actitudes y conductas positivas.
Vicente dio voz con su experiencia en primera persona de las muertes que producen estas carreras, pues a su hijo lo mataron unos conductores durante una carrera ilegal que llevaba años denunciando sin que la policía hiciese nada al respecto. Así empezó su lucha, grabando las carreras e informando a la policía. Explica que encontró consuelo en P(A)T, usando su duelo para que otras personas nunca sientan el dolor de la muerte de un hijo por un suceso tan evitable como un siniestro. Reflexionó también sobre el camino que aún queda, pues las carreras ilegales siguen sucediendo.
Puedes ver sus intervenciones a partir del minuto 58.
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