Año nuevo
Barcelona, Final 2021
Ya acabó 2021, otro año atípico. Se escuchan pocos comentarios sobre los ciudadanos que hemos perdido por acciones violentas – tampoco los que han fallecidos por la pandemia de esta nueva ola, que parece no tener fin.
Periódicos, televisiones y radios están llenos de comentarios sobre la Covid, la mayoría sin contenido sobre cómo lograr frenar el ataque del virus a la humanidad.
Algo parecido se ha visto en Seguridad Vial, que en sus más de cien años de historia, parece que no se ha encontrado solución, como tampoco en la violencia de género y otras violencias. ¿Cuándo entenderemos que la guerra contra otros humanos no es justificable?
No es justificable fabricar y vender máquinas que pueden matar y herir a otros seres humanos. Puede ser más cómodo y rápido hacer algún viaje en coche, pero esto no es suficiente para justificar la matanza y las agresiones, resultado de estas pequeñas ganancias.
Emerge una gran tristeza al ver y sentir la ignorancia que casi todos (dirigentes y ciudadanos) demuestran con respeto a los miles de muertos por la Covid – pero no en suficientes personas como para parar la indiferencia que grandes grupos muestran ante la pérdida de vidas de conciudadanos. Si hay que dejar de ganar más dinero – se deja. Si hay que quedarse en casa – uno se queda. Lo mismo podría aplicarse en el caso de la movilidad: se puede dejar el coche en casa y evitar así accidentes y agresión al Planeta por la contaminación atmosférica y acústica.
Que en 2021 hayan muerto en España casi 1.000 personas por siniestros de tráfico (datos provisionales de la DGT) – no parece inquietar a los dirigentes. La realidad es que hay más coches en calles y carreteras. El bienestar de los ciudadanos no se consigue pasando parte de la vida en una tira de asfalto y además con gran probabilidad de morir o quedar herido.
Pedimos a nuestros dirigentes (elegidos o no): en primer lugar que protejan nuestra integridad física, y en segundo lugar un razonable reparto de las riquezas entre los ciudadanos. El acumular más dinero no significa que haya que tener más privilegios.
Un vehículo más potente no significa que el propietario tenga derecho a imponerse a otro y adelantar irresponsablemente a los demás en la vía pública. A ver si logramos hacer valer una manera de comportarnos que obedece a un “ceder el paso”. A los que abusen: les llamaremos la atención!
Un buen año nuevo les desea P(A)T
Ole Thorson, miembro de la junta de P(A)T